Luego de que el Gobierno suspendiera temporalmente la exportación de carne de res, la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo (Cainco) cuestionó la medida, señalando que menos venta externa podría generar “mayor pobreza” para la población.
“La respuesta del Gobierno es clara: más Estado, menos exportaciones y más pobreza para los bolivianos. Un camino que ya sabemos cómo termina”, escribió en sus redes sociales Jean Pierre Antelo, presidente de la Cainco.
Carne
Este miércoles, el ministro de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Néstor Huanca, informó que no se autorizarán permisos para la exportación de carne de res hasta que los precios en el mercado interno se estabilicen.
La autoridad señaló que los costos de la carne, en todas sus variantes, incrementaron de manera exagerada en los centros de abasto. Además, el precio del ganado vivo también se encareció.
Huanca apuntó contra los ganaderos como los principales responsables, pues considera que las condiciones climáticas son favorables y no hay intransitabilidad en las carreteras, por lo que no hay motivos para que los precios se disparen.
Al respecto, Antelo señaló que, una vez más, el Gobierno pretende responsabilizar a otros sectores por el incremento de precio.
“La suspensión de exportaciones confirma lo que intuíamos: negar la crisis y apuntar a otros”, protestó el presidente de la Cainco, quien hace un par de semanas cuestionó al Gobierno la falta de autocrítica con su gestión y con la toma de decisiones.
Además de la suspensión de las exportaciones, el ministro Huanca anunció que se doblarán los esfuerzos, en coordinación con el Ministerio de Defensa, para evitar el contrabando a la inversa y los intentos por sacar ganado de a pie a los países vecinos.
Las autorizaciones para exportar carne de res se retomarán una vez el precio en el mercado interno se haya normalizado.