En el marco de su compromiso con la transición energética y la sostenibilidad, el Gobierno promueve activamente el desarrollo de energías renovables, incluyendo la energía solar, eólica e hídrica y un énfasis especial en el hidrógeno verde, informó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo, durante un taller en Oruro.
Este evento contó con la participación de autoridades locales y representantes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), quienes abordaron el potencial del hidrógeno verde en la economía boliviana y su papel en la reducción de emisiones de carbono.
El hidrógeno verde se perfila como una solución energética clave para el país debido a su producción a partir de fuentes renovables y su potencial para sustituir a los combustibles fósiles en sectores industriales y de transporte.
Hidrógeno verde
Gallardo subrayó que la estrategia del Gobierno incluye tanto la preservación ambiental como el aprovechamiento responsable de recursos, particularmente del agua, un insumo esencial en la generación de este tipo de energía limpia.
En este contexto, el viceministro de Energías Alternativas, Álvaro Arnez, presentó la «Hoja de Ruta para el Hidrógeno Verde», un documento que proyecta ambiciosos objetivos para el año 2050 y establece una Estrategia Nacional para desarrollar esta tecnología.
Entre los puntos destacados, se analizan las ventajas competitivas de Bolivia para satisfacer tanto la demanda local como la de exportación, posicionando al país como un líder regional en el sector.
Sustitución de combustibles
Por su parte, el BID señaló que el hidrógeno verde representa una “oportunidad única” para Bolivia de sustituir parte de la demanda actual de combustibles fósiles.
Además, destacó la importancia de establecer una normativa legal específica para atraer inversión y desarrollar una industria de hidrógeno verde que promueva la industrialización y la competitividad.
Como parte de esta visión, el Gobierno trabaja en un proyecto de ley que establecerá los marcos regulatorios para impulsar y proteger las inversiones en hidrógeno verde.
Este enfoque también se alinea con las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) y los compromisos internacionales de Bolivia en la lucha contra el cambio climático, apuntando hacia un desarrollo más sostenible y autónomo energéticamente.
