El presidente del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), Mario Cazón, denunció que funcionarios de esa entidad fueron amedrentados en Villa Tunari, cuando fueron a fiscalizar la Copa Evo; sin embargo, se constató la venta de entradas y ahora los organizadores tendrán que tributar.
El domingo pasado se inauguró la segunda versión de la Copa Evo. El evento deportivo fue cuestionado en la gestión pasada por no tributar la venta de entradas para presenciar el campeonato. El expresidente Evo Morales rechazó pagar impuestos bajo el argumento de que el campeonato es sin fines de lucro y todo lo recaudado se destina a cubrir los gastos.
“En Villa Tunari estaban más de 20 funcionarios de Impuestos Nacionales en las puertas de acceso al estadio. Luego de un cierto tiempo, aparecieron dirigentes y prácticamente pidieron que los servidores públicos se retirasen de ese lugar. Inclusive, señalaron que no se responsabilizan si es que ocurriese algo con los funcionarios de Impuestos Nacionales. Ante esa información, instruí evitar cualquier situación y cuidar la integridad de los servidores públicos”, indicó Cazón a DTV.