El Gobierno nacional prevé reducir el déficit fiscal de 12 a 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021 enfatizando la inversión pública como elemento dinamizador de la economía.
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, en una entrevista realizada ayer en PAT, informó que, a diferencia del año 2020, el déficit fiscal se explicará mayormente por la inversión en proyectos y empresas públicas con lo que se busca la reactivación económica.
La autoridad mencionó que el Presupuesto General del Estado (PGE) 2021 contempla la reducción del 30 por ciento de gastos administrativos a partir de la disminución de ítems, además de la optimización de compras de materiales, suministros y contrataciones de ciertos servicios. De este modo, se proyecta retornar al superávit corriente que, en 2020, llegó a -5,6 por ciento.
Destacó también que el PGE contempla 4.011 millones de dólares para la inversión pública. Los proyectos de inversión serán financiados con fuentes externas, es decir, en base al endeudamiento.
El investigador en desarrollo productivo Enrique Velazco Reckling, en una columna publicada en este medio a inicios de febrero, afirmó que los efectos de la inversión pública sobre el stock de capital y la productividad se dan en el mediano y largo plazo. Señaló que no es técnicamente sustentable insistir en reactivar la economía a corto plazo mediante la inversión pública.
MONTENEGRO DESTACA PAGO A CONSTRUCTORAS
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, informó que durante los primeros 100 días de Gobierno de Luis Arce Catacora se retomaron proyectos públicos en la Unidad de Proyectos Especiales (UPRE), lo que permitió pagar a las empresas constructoras que no habían recibido el pago por avance de obras durante los 11 meses del Gobierno de transición.
Cabe mencionar que la deuda estatal a las empresas constructoras no se remonta al Gobierno de Jeanine Áñez, sino al de Evo Morales, pues en ese entonces la deuda ya superaba los 2.000 millones de bolivianos, según las cámaras departamentales de la construcción.
Montenegro indicó que uno de los proyectos reactivados es el tren metropolitano, para el cual se pagaron algunas planillas por un valor de al menos 100 millones de bolivianos.
El pasado 4 de febrero, el presidente de la Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), Aldo Sülzer, informó que las deudas hacia las constructoras se mantienen con montos importantes y que, según las estimaciones de esta institución, la deuda total se mantiene en alrededor de 2.000 millones de bolivianos a nivel nacional.
“Las instituciones públicas de los diferentes niveles de Gobierno deben a las empresas privadas de construcción por planillas de avance de obra impagas, debido a los problemas de flujo de caja que tienen por la caída de los ingresos fiscales”, dijo Sülzer.