La fiscalía venezolana anunció este jueves que una alerta roja de Interpol pesa sobre Rafael Ramírez, expresidente de la petrolera estatal PDVSA y cercano colaborador del fallecido mandatario Hugo Chávez, quien es investigado por corrupción.
«Se le ha solicitado ha Interpol que lo detenga en Italia donde vive como un magnate», dijo el fiscal general Tarek William Saab.
Exjefe de PDVSA (2004-2014) y exministro de Petróleo (2002-2014), Ramírez fue uno de los hombres de confianza de Chávez (1999-2014), pero rompió a finales de 2017 con su sucesor, Nicolás Maduro, renunciando entonces al cargo de embajador de Venezuela ante la ONU.
Según Saab, Ramírez está involucrado en siete investigaciones por corrupción, que incluyen la compra de un «buque chatarra» para la explotación de gas, la malversación de fondos y el cobro de coimas.
«Todas estas tramas (fueron) lideradas por este sujeto Rafael Ramírez, tramas totalmente vergonzosas, inmorales», fustigó Saab.
«Esperamos que Italia, ante la solicitud que ha hecho de manera formal el Estado venezolano, entregue a este criminal para que responda ante la justicia con el debido obviamente juicio que le corresponde», reiteró el fiscal, que también pidió a Roma su captura y extradición.
Otros exdirectivos de la estatal petrolera ya fueron detenidos y enfrentan procesos penales.
En julio, la corte suprema venezolana dio su aval para solicitar la extradición de Ramírez, que estaría involucrado en el desvío de cientos de millones de dólares mediante operaciones de intermediación de compra-venta de crudo con un detrimento patrimonial de 4.800 millones de dólares, según explicó Saab en 2017.
«Otra vez las infamias del fiscal sicario y los palangristas del odio», escribió Ramírez en Twitter. «NO TENGO NINGUNA ORDEN DE CAPTURA, los únicos que no pueden salir del país son ustedes!».
