De enero a junio de 2022, las importaciones de combustibles en Bolivia crecieron en un 143% respecto de similar período de 2021, pasando de 729 millones de dólares a 1.772,5 millones de dólares hasta junio de 2022.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las importaciones de gasolina y de diésel llegaron a los 1.772,5 millones de dólares, cifra superior en los 1.043,5 millones de dólares a lo importado de enero a junio de 2021, cuando las compras internacionales de combustibles registraron un valor de 729 millones de dólares.
Los datos del INE muestran que las importaciones de combustibles representan el rubro más importante en las compras internacionales de enero a junio de 2020.
El gerente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb), Marcelo Olguín, señaló que este incremento se debe a dos factores; en primer lugar, a una subida en los precios de los hidrocarburos en el mercado internacional y en segundo lugar a una mayor demanda de combustibles en el mercado interno.
Cabe recordar que a raíz de la guerra en Ucrania, los precios de los hidrocarburos se han situado por encima de los 100 dólares por barril de petróleo, con un comportamiento similar respecto a la gasolina y el diésel.
“El primer semestre hemos visto que el barril de crudo ha estado superando los 115, 110 dólares en muchas semanas y ha estado por encima de los 100 dólares en buena parte de este período. Eso con respecto a otras gestiones es algo que no se daba”, explicó Olguín.
Respecto a la demanda, el experto señaló que, desde la segunda parte del año pasado se han producido incrementos en los precios internacionales de nuestras exportaciones, lo que ha llevado a una mayor producción y demanda de carburantes.
“Los precios internacionales han acompañado a nuestras exportaciones. Eso alienta la producción y requiere mover la actividad productiva, lo que representa más camiones, más cosechadoras, más maquinaria y eso tiene una respuesta por el lado del volumen de combustibles utilizados”, agregó.
Exportaciones
A junio de 2022, las exportaciones de Bolivia crecieron en 1.925 millones de dólares respecto a 2021, llegando a los 7.012 millones de dólares, de acuerdo con los datos proporcionados por el INE, en los seis primeros meses del año.
Bolivia registra un saldo comercial positivo de 1.220 millones de dólares, monto mayor al reportado a similar período de 2021, cuando alcanzó a 926 millones de dólares.
Olguín indicó que el incremento en el valor de las exportaciones fue impulsado por la industria manufacturera, en especial por las ventas externas de oro metálico (1.395,1 millones de dólares) y productos derivados de la soya (955,5 millones de dólares).
“Entre los productos que tienen mayor peso están aquellos clasificados como industria manufacturera, dentro de los cuales se destacan las exportaciones de oro metálico, que representan casi el 20% de las exportaciones totales; luego tenemos soya y sus derivados, que han tenido un ritmo de crecimiento importante de 43,7%. Se exporta también en esta gestión una mayor cantidad de estaño metálico; en gestiones anteriores se exportaba mineral de estaño, lo cual es algo positivo porque se está agregando valor”, explicó el experto
Otras exportaciones con un desempeño destacado en la primera mitad del año son la úrea granulada que llegó a los 136 millones de dólares; la carne bovina con 63,8 millones de dólares y un crecimiento del 37% con respecto a 2021; y otros productos como el azúcar, el alcohol y sales de potasio, entre otros.