[stock_ticker]

Ingresos de $us 285 MM por urea no cubren inversión y hay dudas por paro

En casi cuatro años, la venta de urea producida por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) generó ingresos por 285 millones de dólares. Esta cifra aún no cubre la inversión de casi mil millones que el Estado pagó para construir la planta petroquímica de Bulo Bulo.

Según YPFB, la planta produce al 75 por ciento de su capacidad y se espera un paro programado de 20 días para elevar la producción al 100 por ciento, con dudas que aún no son resueltas por la empresa estatal, según dos analistas.

La planta comenzó a operar a fines de 2017. De acuerdo a YPFB, en 2018 se generó 69 millones por la venta de urea; en 2019 fueron 75,1 millones; en 2020, cero por la paralización durante el gobierno de Jeanine Áñez; en 2021 hubo 37,4 millones de ingresos, y en el primer cuatrimestre de 2022 fueron 103,4 millones.

Si bien la construcción de la planta demandó cerca de mil millones de dólares, no se sabe con precisión el costo operativo de cada año. En enero de 2022, YPFB indicó que los costos operativos en 2021 llegaban a los 44 millones de dólares por año, un 50 por ciento menos de años anteriores.

«Es hora de que se cubra los costos operativos y además se recupere el capital invertido que con este nuevo paro me imagino que estará arriba de los 1.100 millones de dólares», señaló el consultor en Hidrocarburos Álvaro Ríos.

Además, cuestionó que se requiera un nuevo paro para lograr el 100 por ciento de producción.

El investigador en temas energéticos de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez, recordó que, desde que se anunció la construcción de la planta hasta la fecha, hubo dudas sin resolver con relación a estudios de mercado y la planificación de la producción.

«Es impensable que una inversión de esta magnitud se recupere en el corto plazo, pero quedan muchas dudas en términos de estudios de mercado, contratos, precios, costo de transporte y otros. Es posible que a la planta hayan entrado casi 300 millones, pero queda conocer cuáles son los costos y la rentabilidad esperada», añadió Velásquez.

En 2014, el entonces presidente de YPFB, Carlos Villegas, anunció que con la entrada en operación de la planta en 2016 se generaría 260 millones de ingresos al año. La planta no comenzó a operar sino hasta fines de 2017 y hasta la fecha en ninguno de los años pasados sus ingresos se acercaron a la cifra propuesta.

Ahora, YPFB apuesta por llegar a una producción del 100 por ciento, que equivale a 2.100 toneladas por día. Espera que para 2023 la cifra diaria de producción suba a 2.300 toneladas. Para este año se proyectó ingresos aproximados de 300 millones de dólares.

¿Hay materia prima para otra planta?

YPFB anunció la construcción de una nueva planta de urea para ampliar la oferta del fertilizante hacia el mercado internacional, ahora que el precio del mismo se ha elevado.

El consultor en Hidrocarburos, Álvaro Ríos, dijo que se debe prestar especial atención a la rentabilidad y a la disponibilidad de la materia prima, ya que la producción de gas y petróleo en el país va en decremento sin miras de que esto vaya a revertirse en el corto y mediano plazo.

El investigador Raúl Velásquez recordó que el anuncio de una nueva planta debía hacerlo la Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos (EBIH) y no YPFB.

Related Articles

ÚLTIMAS NOTICIAS