La crisis económica y energética que presenta el país por la falta de dólares, combustibles, restricciones a las exportaciones, presiones tributarias e inflación, inviabilizan el aumento salarial solicitado por el aliado del Gobierno, la Central Obrera Boliviana (COB).
Los microempresarios a nivel nacional rechazan el incremento salarial solicitado por el aliado de la COB, debido a que va en contra del sector de la micro y pequeña empresa, y ponen riesgo su estabilidad y continuidad.
Para la representante del sector, Helen Rivero, el actual ejecutivo de la COB, Juan Carlos Huarachi, no representa al sector que genera empleo.
«Empresarios privados paceños ven con preocupación la propuesta de la COB”, y más bien “demandan diálogo para establecer políticas que incentiven el desarrollo empresarial», según el comunicado de la Federación de Empresarios Privados de La Paz (FEPLP).
“La Federación de Empresarios Privados de La Paz manifiesta la inviabilidad de realizar incremento salarial alguno dada la coyuntura económica actual, por lo cual rechaza la demanda de incremento salarial planteado por la Central Obrera Boliviana (COB) para el sector formal de 20% al haber básico y 15% al salario mínimo nacional”, apuntan.
Los empresarios sostienen que es necesario hacer un diagnóstico de la situación económica actual de las empresas, en esta etapa de crisis generalizada, donde persisten las presiones tributarias, la falta de combustible, de dólares, la inflación y la restricción en las exportaciones.
“Cualquier decisión respecto al incremento salarial debe ser consensuado con el empresariado, quienes son los que finalmente deben afrontar esta medida, recalcando que este solo llega a los trabajadores formales”, resaltan.
Los analistas económicos y organizaciones empresariales, en reiteradas oportunidades, indicaron que el aumento salarial sólo llega a un 20% de los trabajadores, debido a prima la informalidad que está por el 80%.
“Exhortamos al Gobierno, considerar la posición del empresariado y sus posibilidades en la actual coyuntura económica y social donde la población se encuentra preocupada por llevar el sustento a sus familias y demanda mayores fuentes empleo digno”, sostienen los empresarios.
Asimismo, solicitan un diálogo permanente para contar con la seguridad jurídica, incentivos y las condiciones adecuadas para desarrollar la actividad privada por lo que esperan ser convocados para una reunión tripartita entre el Gobierno, la Central Obrera de Bolivia y los empresarios privados con el objetivo de salvar el empleo y no adoptar medidas que vayan en contra de la actividad formal.
“De no tomar medidas efectivas respecto a la crisis actual y evitar mayores factores que asfixien a los sectores productivos, las consecuencias serán mayores en cuanto al desempleo, la pobreza y la quiebra de varias micros, pequeñas y grandes empresas que están soportando los resultados de una mala administración de recursos por parte del Gobierno”, alertan.