El Gobierno insistió este martes en que la salida a la emergencia por la escasez de combustibles está en la aprobación de los créditos externos en la Asamblea Legislativa Plurinacional, luego de que el Senado asegurara que no tiene pendiente de tratamiento ningún préstamo internacional destinado de manera exclusiva a la adquisición de diésel o gasolina.
El Ejecutivo explicó que, si bien ninguno de esos créditos tienen como fin la adquisición de combustibles, sí es posible usar esos dólares para la compra de carburantes en el mercado internacional.
El Senado, en un comunicado, aseguró que no tiene “ningún proyecto” de Ley que apruebe algún contrato de préstamo destinado al suministro, comercialización o distribución de combustibles, luego de que el Gobierno exigiera al Legislativo dar vía libre a los créditos externos en cuestión. “Rechazamos cualquier intento de responsabilizar al Senado por la escasez de carburantes en el país”, rechazó la Cámara Alta.
En la misma línea, el jefe de bancada de CC en la Cámara de Diputados, Enrique Urquidi, señaló que ninguno de los créditos pendientes tienen como fin la compra de combustibles y que todos tienen designado otro fin. Además, rechazó que la solución a la crisis de combustibles esté en la aprobación de esos préstamos.
“La gran mayoría de los créditos que hoy están en la Asamblea Legislativa Plurinacional (tienen) nombre y apellido, tienen un objeto concreto. Por lo tanto, no es cierto que, como el Gobierno (lo) quiere plantear, que esos créditos, una vez aprobados, van a ser la solución al problema de desabastecimiento”, dijo el legislador opositor. “Los contratos tienen un objeto claro que no puede cambiarse en función a los intereses o a las necesidades del Gobierno”, añadió.
ES POSIBLE
El ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, sin embargo, aseguró que, si bien esos créditos tienen un fin concreto, los dólares de esos préstamos sí se pueden usar para comprar combustibles. Explicó que, una vez que se aprueba un crédito, cuando la entidad ejecutora del proyecto o la obra solicita al Banco Central de Bolivia (BCB) el desembolso de esos recursos, este no entrega necesariamente el dinero en dólares, sino en moneda nacional. Dijo que eso es posible porque, en general, las contrataciones en el país no se concretan en moneda extranjera.
“El financiador, en su momento, lo que hace es recibir esa solicitud de desembolso. Realiza el desembolso en divisas, en dólares generalmente (…). El Banco Central, una vez que recibe esos recursos, en moneda extranjera, en un siguiente momento, lo que hace es entregarle (ese dinero) al ejecutor (…) en moneda nacional, porque, en general, nuestras obras son contratadas en moneda nacional”, explicó Cusicanqui en una entrevista con radio Panamericana.
“Y, en un segundo momento, este desembolso, (el) que ha recibido el Banco Central del financiador, y que ya ha sido transferido en moneda nacional al ejecutor (…), se queda en el Banco Central para poder atender los diferentes pagos al exterior”, entre ellos, el pago de la deuda externa y “la importación de combustible”, complementó el Ministro.
“Es así como funciona, es así como ha funcionado desde hace muchísimos años este mecanismo de financiamiento externo, y es por eso la importancia de la aprobación y consideración de los proyectos de ley en la Asamblea Legislativa”, insistió Cusicanqui.
El Ministro, sin embargo, no precisó cuánto del total de los 1.600 millones de dólares en créditos pendientes en el Legislativo se podrán usar para la compra de combustibles ni cuánto tiempo tardará acceder a esas divisas, en caso de que el Legislativo acceda a aprobarlos.
Se limitó a decir que, si la Asamblea aprueba estos créditos, “vamos a tener mejores condiciones para enfrentar este bache”.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, se pronunció anoche en el mismo sentido. Señaló que, si bien los créditos no están destinados a la compra de combustibles, si se aprueban, mejorarán el flujo de dólares en el país.
“Quieren desinformar sobre la responsabilidad que tienen sobre la no aprobación de créditos y el flujo de dólares. Quieren lavarse las manos”, afirmó Prada en una conferencia de prensa. “Los dólares que ingresan por los créditos se destinan al pago de la deuda externa, la compra de combustibles y otros requerimientos en divisas extranjeras”, añadió al acusar al Legislativo de acumular ya 26 meses de bloqueo a los préstamos internacionales.
VENTA
YPFB informó que venderá combustibles a la industria y el sector agropecuario a través de Botrading S.A. en moneda boliviana debido a la escasez de divisas que enfrenta la entidad estatal.
Pago de deuda externa dejó sin dólares a YPFB
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, afirmó este martes que el pago de la deuda externa dejó sin dólares al Estado para comprar combustibles.
“Este mes no ingresó nada por créditos. Entonces, los gastos de todos los dólares se fueron a cubrir eso (deuda externa). ¿Por qué es importante cubrir eso? Porque si no cubrimos eso, en el futuro los organismos internacionales no te van a dar dólares tampoco”, dijo el titular de la estatal petrolera en un contacto con radio Panamericana.
En ese sentido, dijo que el problema no está la falta de recursos en el país, sino den el flujo de divisas. “Históricamente, Bolivia ha cubierto sus créditos con otros créditos, como lo hacen la mayoría de los países”, añadió.
Ríos: “Esto es algo peor que un gasolinazo”
El exministro y experto en hidrocarburos Álvaro Ríos afirmó que la crisis de combustibles “desnudó” que “el problema de fondo” es el modelo económico del gobierno, que se basa en una escasa o nula inversión privada y un Estado que lo resuelve todo.
“Esto es algo peor que un gasolinazo”, dijo Ríos, que explicó que hoy el problema es mayor porque la escasez de combustibles afecta también al aparato productivo del país. “Y encima ni siquiera puede (el Gobierno) abastecer el mercado”, agregó.
“Yo creo que lo que debiera haber hecho hace mucho tiempo (el Gobierno) es abrir el mercado, facilitar que los privados hagan (también) importaciones (de combustibles). Creo que el modelo está agotado (…). Tendrá que venir un nuevo gobierno, con un nuevo modelo económico, que nos diga cómo va a resolver esta profunda crisis energética en los próximos cinco años”, señaló Ríos.
“Y, además, si no tenemos gas de aquí a cuatro o cinco años, vamos a tener cortes eléctricos y, como le digo, a partir de este de este año, vamos a tener problemas con el GLP”, alertó el experto, que insistió en que no se tomaron las medidas necesarias en el pasado para evitar esta crisis.
Rodríguez: “El papá Estado se acabó”
El exsenador y experto en hidrocarburos Fernando Rodríguez afirmó que el problema principal del país es la subvención de los hidrocarburos, por lo que señaló que Bolivia necesita cambiar su matriz energética.
“Lo real es que el modelo ha fracasado. Lo malo es que, obviamente, el país ha colapsado en el tema energético, que ha repercutido en el tema económico. Y yo digo: la madre de todos los males es la subvención salvaje”, dijo el experto.
“Es mejor dar incentivos a las empresas transnacionales que sacar 4.000 millones de dólares por año (para la subvención), que se van incrementando todos los años. Esto, obviamente, no tendrá solución si no se toman medidas estructurales”, agregó Rodríguez.
Alertó, no obstante, que nadie podrá resolver el problema solo. “Tiene que haber un gran acuerdo.
El pacto de los partidos tiene que ser para salvar al país, no para salvar a los políticos. El pacto tiene que ser para ayudar a todo el país, en su conjunto, para que haya combustible, para que los precios no sigan subiendo (…). O sea, tiene que haber una política integral, un cambio de timón, un cambio de chip, si va del término. El papá Estado se acabó”, señaló.