El Ministerio de Economía confía en alcanzar un crecimiento económico significativo en 2025 mediante una estrategia basada en inversión pública, desarrollo industrial y mejora en la productividad agrícola. El titular de esa cartera de Estado, Marcelo Montenegro, destacó que estas acciones también contribuirán a reducir el déficit fiscal y garantizar estabilidad económica.
“Visualizamos un 2025 mejor que el 2024, con una mayor producción y una contención de precios que van a permitir aplacar la tasa de inflación”, señaló Montenegro, subrayando la inauguración de proyectos estratégicos y la industrialización con sustitución de importaciones como pilares de este plan.
Proyectos
De acuerdo con un boletín del Ministerio de Economía, entre los proyectos más destacados se encuentran la entrada en operación de la Planta Siderúrgica del Mutún, con capacidad para producir 200.000 toneladas métricas de acero anuales, y la planta de biodiésel Fame 2 en El Alto. Estas iniciativas permitirán ahorrar divisas y reducir la subvención de carburantes.
Además, el Gobierno tiene prevista una inversión pública de $us 4.024 millones en 2025, destinada a sectores estratégicos como minería, hidrocarburos y agroindustria. En minería, se proyecta la reactivación del yacimiento Mesa de Plata y la exploración de minerales tecnológicos como el niobio, que ofrecen oportunidades en mercados globales.
Asimismo, según Economía, se desarrollarán decenas de plantas industriales, entre ellas, 10 plantas de bioinsumos, procesadoras de cereales, frutas y productos cárnicos. También se pondrán en marcha 10 plantas procesadoras de papa y cuatro de yuca, orientadas a potenciar la productividad agrícola.
El impulso a la producción agrícola busca no solo cubrir la demanda interna, sino también generar excedentes para exportación.
Economía
El Ministerio de Economía proyecta un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 3,51% y una inflación del 7,5%. Asimismo, el déficit fiscal, estimado en 9,2% del PIB, será contrarrestado con el aumento de ingresos derivados de nuevos proyectos industriales.
La incorporación de Bolivia al Mercosur también se perfila como una oportunidad estratégica, ofreciendo acceso a un mercado de $us 3,4 billones y condiciones favorables para las exportaciones.
Con estas acciones, el Gobierno apunta a consolidar una recuperación económica sostenible, generando empleo y dinamizando los sectores productivos clave del país.
Este jueves, en la inauguración de la planta procesadora de subproductos de soya, el presidente Luis Arce señaló que la industrialización “no es un cuento”, por lo que auguró un mejor 2025.