La Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública (Fesirmes) realizará un paro de actividades de 24 horas este martes, 10 de diciembre, en rechazo a los más de 500 despidos de profesionales de salud aplicados por la alcaldía.
En un comunicado, Fesirmes exige la restitución inmediata del personal retirado y la anulación de los memorándums de despido, los cuales calificaron como «ilegales». Según Evert Patiño, secretario de Conflictos del gremio, estos ceses se justificaron con argumentos «banales», como la falta de presentación de la libreta de servicio militar, a pesar de que los profesionales afectados habían entregado la documentación requerida.
El pliego petitorio también demanda el respeto a los derechos laborales, el pago puntual de salarios y sanciones contra los funcionarios responsables de las irregularidades administrativas. «Exigimos procesos legales contra quienes han cometido abusos de autoridad y negligencia administrativa», sostuvo Patiño.
Por su parte, la Dirección de Recursos Humanos del municipio aseguró haber restituido a 149 funcionarios tras la presentación tardía de sus libretas de servicio militar, e indicó que las movilizaciones convocadas por Fesirmes serían ilegales según la normativa vigente.
En un comunicado firmado por Germán Arrieta Justiniano y Elva María Paredes, representantes municipales, se apeló a la Constitución y a la Ley General del Trabajo para cuestionar la medida de presión y advertir sobre sus posibles implicaciones legales.
Los recortes de personal han afectado a centros de salud de primer nivel y hospitales de segundo nivel, administrados por el municipio. La medida surge en un contexto de dificultades financieras admitidas por la propia alcaldía. Esta situación ha provocado una demora en el pago de los salarios de octubre, pese al compromiso de hacerlo hasta el 10 del siguiente mes.