Casi todos los incendios forestales en el país han sido extinguidos, la contaminación ambiental se ha reducido al mínimo, pero los efectos de los daños provocados todavía no han sentido o vislumbrado, afirmó Luis Alberto Alpire, mejor conocido como el ´Señor del clima’.
De acuerdo con el análisis del agrometeorólogo, las consecuencias de los daños provocados por los incendios forestales se conocerán a partir de la próxima gestión.
«Son alrededor de 9 millones de hectáreas, que suponen el 24% del territorio cruceño que fue consumido por el fuego. El 61% es área boscosa y el 39% pastizales, lo que traerá efectos negativos sobre todo en la próxima temporada seca», advirtió el profesional.
En cuanto a los efectos en los servicios ambientales, Alpire remarcó que se prevé «una inferior generación de oxígeno, una disminución en la biodiversidad, una degradación o destrucción del suelo, un menor refugio de vida silvestre, una menor condición de mitigación al impacto del cambio climático por la pérdida de bosque, además de la disminución de la producción de alimentos porque el suelo demorará en recuperar sus nutrientes (son mínimo de cuatro años)».
Sin embargo, a corto plazo también se sentirán algunos efectos como cuando se presente la época seca, entre junio a octubre. «Ahí vamos a sentir, sobre todo en el área como San Matías, Urubichá, San Ignacio, Concepción y San Rafael, fueron los más afectados por las quemas del 2024. En general, la Chiquitania, sentirá los efectos de este desastre».
Adelantó que el impacto «será una extrema sequía, menor precipitación de lluvias, consecuentemente la elevación de las temperaturas máximas. Entonces se avecina un año con una extrema sequía, en el área donde mayormente han sido afectado por los fuegos».
En los últimos días se registró un descenso de los puntos de calor como de los siniestros activos, principalmente en la Chiquitania.
