La economía boliviana crecerá este año un 1,6%, según las proyecciones divulgadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) este martes. La cifra es menos de la mitad del 3,7% que proyectó el gobierno nacional.
Hace unos días, el Banco Mundial estimó un aumento del Producto Interno Bruto (PIB) de 1,4% para Bolivia, mientras que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) proyectó un 1,7%. Al primer trimestre de esta gestión la economía se expandió un 1,3%, según datos del estatal Instituto Nacional de Estadística (INE). El FMI mantiene así las proyecciones hechas en abril pasado cuando calculó también un aumento del PIB de 1,6%. Para el 2025 espera un leve repunte hasta 2,2%.
En su informe, Perspectivas de la economía mundial, octubre 2024, el FMI también calcula una inflación de 4,3%, aunque esa estimación está un punto por debajo del aumento de precios ya alcanzado entre enero y septiembre de este año de 5,3%, según las cifras del INE.
“Estamos por debajo del crecimiento de Latinoamérica, de Sudamérica, del Caribe, de Norte y Centro América”, señaló Luis Fernando Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija. El profesional agregó que Bolivia será el segundo país de menor crecimiento de Sudamérica, junto a Colombia.
El país afronta un 2024 complicado marcado por el crónico desabastecimiento de combustibles, los bloqueos recurrentes que perjudican sobre todo al comercio exterior y la falta de dólares que ha encarecido los insumos, en su mayoría importados, en diversos rubros.