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La larga travesía exploratoria en el Subandino Norte

Por Jorge Márquez Ostria, Ingeniero Geólogo, consultor en hidrocarburos

El Ingeniero Geólogo Fernando Alegría, describe en un artículo para la CBHE la labor que se ha venido desarrollando en torno a la búsqueda de petróleo en el norte del Departamento de La Paz, indicando que hasta el 2016 se puede dividir ese esfuerzo exploratorio en cinco fases: la primera fase comprende todos aquellos trabajos de índole geológica efectuados desde los inicios del siglo XX hasta el año 1962; la segunda fase comprende el periodo de 1962 a 1976 en el que se procedió a la perforación de dos pozos exploratorios por parte de compañías extranjeras; la tercera fase comprendida entre los años 1976 a 1996, cuando YPFB y Total perforan cuatro pozos exploratorios. La cuarta fase (1996-2008) es un periodo en el que compañías de la talla de Petrobras, Repsol, Total y YPFB-Petroandina tienen concesiones de tipo exploratorio y las que se dedican, mayormente, a realizar trabajos de gabinete. Una quinta fase dentro de esa travesía, se inició el 2009 con la adquisición de sísmica 2D para luego seguir con la perforación del pozo Liquimuni Centro X1, actividad desarrollada por YPFB-Petroandina en el lapso del 2014-2015, con resultados poco halagadores en cuanto al descubrimiento comercial de hidrocarburos.
Hasta aquí el resumen del valioso documento de Fernando Alegría, pero es necesario que nos detengamos a analizar el fallido intento de Petroandina, que como bien señala el geólogo Luis Constantini, que participó en los estudios y análisis previos a los trabajos de exploración iniciados a fines del 2008, en principio se visualizó la zona de Mayaya como la de mayor interés, pero desde Caracas PDVSA no aceptó esa recomendación, optando por perforar el pozo Liquimuni Centro resultando un fracaso por que no era la mejor opción, refiere el experimentado geólogo Constantini.

Importancia del Mayaya X1
Con este pozo exploratorio descubridor en el Subandino Norte, se amplía la frontera exploratoria en áreas no tradicionales y se comienza a abrir una nueva provincia geológica hidrocarburífera en un área de aproximadamente 2.000 kilómetros cuadrados, con varias estructuras de tamaño mediano cuya evolución geológica, sincronismo etc. son los mismos que la estructura perforada por el Mayaya, por lo que la probabilidad de que todas las estructuras cerradas por debajo del sinclinal Mayaya sean productivas es alta, ya que tienen el mismo sistema petrolero.
En conclusión, podemos afirmar que un conglomerado de estas estructuras productivas conformaría un Megacampo, que lógicamente se tendrá que perforar las otras estructuras gemelas, con bajo riesgo exploratorio para confirmar este gran hallazgo.

La Paz, nuevo productor
En la década de los setenta, al lado de la clasificación tradicional entre países industrializados y subdesarrollados o del tercer mundo, apareció otra nueva, entre exportadores o importadores de petróleo, este hecho relieva la importancia que la política petrolera adquirió para el desempeño de las naciones.
La misma diferencia se estableció en el país, esta vez entre departamentos productores de hidrocarburos que estuvieron en capacidad, no siempre bien aprovechada, de dar un considerable impulso a su desarrollo y el resto de los departamentos que padecieron por falta de inversión petrolera.

El último departamento en entrar a este exclusivo club de productores de hidrocarburos, fue Cochabamba, pero como tradicionalmente fue refinero, no le dieron la importancia que merecía al ser el principal productor de líquidos desde el descubrimiento de Carrasco en 1991, pero el caso del departamento paceño es muy diferente por que actualmente estamos dentro de un proceso de transición energética global y los países buscan su seguridad energética, priorizando la producción nacional de energía y la cooperación regional.

Esta vez lo tenemos que hacer bien, sin prisas y siguiendo una planificación rigurosa, equilibrada y además pragmática, con pasos técnicamente serios y eficientes para terminar de construir el segundo hito histórico petrolero boliviano. Quedan enormes desafíos, pero el MYC-X1 comenzó a abrir una nueva provincia geológica hidrocarburífera que podría tener un impacto significativo en otros sectores de la economía boliviana, atrayendo inversión extranjera en infraestructura, servicios y personal.

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