El gobierno cerró filas este jueves para defender el referéndum que impulsa el presidente Luis Arce, pese a los cuestionamientos sobre su legalidad y sobre su utilidad real para resolver los problemas que actualmente atraviesa el país.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, explicó que se decidió incluir el subsidio de los combustibles para no cometer el error en el gasolinazo decretado a fines del 2010 en el gobierno de Evo Morales «sin involucrar al pueblo en la decisión, siendo que el tema de la subvención y combustible hace a la economía diaria de las familias bolivianas”. El vicepresidente David Choquehuanca también expresó su apoyo a la iniciativa de Arce. “Gobernar escuchando al pueblo”, remarcó en sus redes.
El ministro de Justicia, Iván Lima, ha insistido en que el presidente puede convocar al referéndum, amparado en la Ley 026 e insiste en que la consulta no es para reformar la Constitución. Opositores discrepan y señalan que las preguntas 1 y 4 sobre reelección y escaños si implicarían ajustes en la Carta Magna y agregan que el presidente estaría vulnerando la propia CPE, ya que la misma no establece la convocatoria por decreto para estos temas.
Jorge Akamine, presidente del Colegio de Economistas de Bolivia, considera que las dos preguntas sobre la subvención son irrelevantes, además que se le hace la consulta a la población sobre un tema técnico. «No se puede preguntar a quien no conoce. Es un tema demasiado técnico, al que debe encontrarse solución desde el Ejecutivo, hay un abanico de posibilidades», enfatizó Akamine.
Fernando Romero, de los economistas de Tarija, coincide en que el referéndum no resolverá nada estructural y con la posibilidad de que sea respondido por una población desinformada sobre esta problemática.
“El pueblo con seguridad va decir que no quiere que suba el precio de la gasolina y eso compromete a lo que quiera hacer este Gobierno y el próximo”, advirtió el empresario Samuel Doria Medina.
El economista Gonzalo Chávez ve además una retórica populista e irónizo de que si se trata de involucrar al pueblo en todas las decisiones por qué no se hizo referéndum para gastar $us 60.000 millones de ingresos en la época de bonanza.
«Si quieren preguntar al pueblo, pregunten sobre todos los ítems del déficit público: subsidios, tamaño del Estado, aumento de salarios, empresas públicas deficitarias, gastos excesivos», remarcó en entrevista con el programa Que No Me Pierda de la Red Uno.
Políticos opositores cuestionaron además que Arce ponga el tema de la reelección siendo que ya quedó zanjado con el referéndum del 21 de febrero del 2016, cuando se rechazó la repostulación irrestricta, con el fallo de la Corte IDH que estableció que ese no es un derecho humano y con la Sentencia 1010/2023 emitida por el Tribunal Constitucional (TCP).