Luego de la amenaza de realizar bloqueos y marchas de parte de dirigentes gremiales y transportistas, la conflictividad en el país tiende a avivarse.
Los gremiales alistan medidas desde el 8 de junio, y el trasporte pesado, a partir del 3 de junio, en demanda de la abrogación de las leyes relacionadas a la propiedad privada y por falta de dólares e irregularidad en el abastecimiento de combustible, principalmente.
Según el Gobierno, las protestas tienen fines políticos porque aseguran que hay dólares y combustible. El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, aseguró que la provisión de combustible es normal y señaló que algunas estaciones de servicio especulan.
En el caso del transporte pesado, ratificaron la decisión tomada el viernes en un ampliado nacional realizado en Cochabamba. “No hemos sido escuchados y es por eso que se ha determinado por la mayoría de las bases salir en un bloqueo contundente el lunes 3 y martes 4 de junio”, señaló el dirigente Héctor Mercado.
El transportista advirtió que se irá al paro indefinido si el Gobierno no los convoca al diálogo durante los dos días del paro. “Si en esas 48 horas no nos llaman a una reunión, el movimiento va a continuar porque los transportistas estamos sufriendo muchos atropellos”, sostuvo Mercado.
El sector pide una reunión con el presidente Luis Arce para exigir la normalidad en el flujo de dólares porque esta situación ocasionó el encarecimiento de los repuestos para el transporte.
En tanto, desde la Confederación Sindical de Trabajadores Gremiales de Bolivia, su secretario general César Gonzales confirmó con una marcha desde el 11 de junio desde Patacamaya a La Paz y un paro el 17 y 18 de junio.
El dirigente de los gremiales del El Alto, Toño Siñani, informó que en el ampliado del viernes pasado se determinó dar un cuarto intermedio hasta el 7 de junio en sus medidas de presión para que las autoridades gubernamentales los convoque a mesas de diálogo. “Si el Gobierno no llama a la Confederación de Gremiales conjuntamente la Confederación de Trabajadores de Bolivia nos vamos a movilizar el 10 de junio. Tiene oportunidad hasta el 7 de junio, sino es así, sí o sí nos vamos a movilizaciones y bloqueos a nivel nacional”, señaló el dirigente.
El Consejo de Defensa de la Propiedad Privada (Codepp) también ratificó las movilizaciones hasta que se logre la abrogación de los decretos observados por diferentes sectores sociales.
Los decretos rechazados
Uno de los decretos supremos observados por los sectores movilizados es el 4732; piden su abrogación porque marca la intervención del Ministerio de Justicia en contratos de compra y venta de inmuebles.
De acuerdo con el Gobierno, esta institución vela por el bienestar de los ciudadanos porque evita la introducción de cláusulas abusivas en esos documentos.
También rechazan el proyecto de ley 145, que contempla operativos en los comercios y depósitos de los gremiales por los funcionarios de la Aduana Nacional.