Durante la inspección ‘in situ’ que realizaron autoridades de la Gobernación cruceña, a la que acompañó EL DEBER en la reserva forestal de Choré, ubicada entre los municipios de Yapacaní y Buena Vista, en el departamento de Santa Cruz, no sólo se encontró los focos de calor, sino maquinaria pesada, parcelas ya distribuidas y otras incluso puestas en venta.
EL DEBER entrevistó a Rodo Villarroel, ejecutivo de la denominada Federación Choré, quien proporcionó algunos datos llamativos, en medio de los incendios forestales que sacuden a la región.
El dirigente reconoció que se encuentra asentado en la reserva forestal desde 1993, que cuenta con personería jurídica y que su federación tiene 5.300 afiliados.
“Muy bien sabemos que es una reserva forestal, estamos asentados desde 1993, tenemos identidad, una personería jurídica y sabemos muy bien quiénes la han dado. Estas son nuestras tierras”, afirmó con firmeza Villarroel.
En plena reserva forestal poseen ganado y utilizaron la tierra para sembrar soya, arroz y maíz, producción de la que viven, asegura.
Los asentados vienen desde Yapacaní o Campo Víbora, pero no se quedan a pernoctar en la reserva porque aún no tiene agua potable.
Villaroel dijo saber quiénes son los que provocan los incendios forestales, que se producen en lugares donde la ABT ha autorizado asentamientos, y ante esa situación la federación se organizó en cuadrillas para apagar el fuego.
“Las tierras no se pueden vender, como federación Choré nosotros velamos para que la tierra se trabaje. (Sobre las ventas) Son gente que quiere hacernos quedar mal como federación”, dijo.
Inspección evidenció desmontes, chaqueos y asentamientos
El secretario de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente de la Gobernación cruceña, Pablo Sauto, manifestó que fue llamativo hallar gran cantidad de hectáreas quemadas, desmontes provocados, maquinaria pesada y asentamientos con viviendas totalmente precarias.
“Hemos tomado las respectivas imágenes georreferenciadas para preguntarle al INRA cómo ha dotado estas tierras. Es una reserva boscosa donde no puede haber asentamientos”, dijo Sauto a EL DEBER,
Desde la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT) de Santa Cruz, informó que en el lugar se contabilizó al menos 58.000 hectáreas quemadas.
El asambleísta Óscar Fenney afirmó que en el ingreso a la reserva forestal existen terraplenes hechos por «otra mano» y no por comunarios, para los asentamientos, ya que cuenta con una capa base en gran parte del trayecto.
“Es un área donde no existe selva, nos preocupa muchísimo. Como asamblea pediremos que se reafirme la Comisión de Tierras (porque es circunstancial) para venir acá con el INRA y la ABT y hacer una inspección, esto es preocupante”, expresó.
Indicó que la magnitud de los incendios forestales en El Choré, es uno de los motivos por la humareda que inundó en los municipios del norte Integrado y la capital cruceña.
Fenney adelantó que convocarán al director de la ABT y del INRA para que asistan a la ALD y brinden un informe al respecto. «No vemos la presencia del Estado en ninguna parte».