Luego de un rastrillaje epidemiológico, el ministro de Salud, Jeyson Auza, informó este domingo que el país registró 50 casos de tosferina, de los cuales 44 están en recuperación.
“Hasta la fecha, nosotros tenemos 50 casos diagnosticados, se ha hecho el seguimiento, 44 personas están en proceso de recuperación”, dijo.
Al menos seis de los pacientes con la enfermedad se encuentran en observación, aseguró la autoridad de Salud.
Unos 48 casos fueron reportados en Santa Cruz, uno El Alto y otro en Oruro; todos están estables con los tratamientos correspondientes.
No hay decesos
Auza resaltó que hasta la fecha no se ha lamentado el deceso de enfermos, pese a las complicaciones del paro indefinido de 36 días en Santa Cruz.
Durante ese tiempo, al menos 13 ambulancias fueron dañadas por bloqueadores iracundos que evitaron que los vehículos pasen por los puntos de bloqueo.
Y se denunció agresiones físicas al personal médico que intentaba llevar a sus fuentes de trabajo, por lo que Auza catalogó los hechos como un “crimen”.
El paro afectó también a muchas personas que se vieron perjudicadas al no poder acceder a un servicio de salud en hemodiálisis, quimioterapia, entre otras patologías.
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¿Qué es la tosferina?
La tosferina es una enfermedad respiratoria muy contagiosa causada por un tipo de bacteria llamada “Bordetella pertussis”.
La coqueñuche es 17 veces más infecciosa que el COVID-19.
Esta enfermedad se caracteriza por una tos seca e intensa, y se transmite mediante gotículas salivales que se expulsan al hablar o toser.
Llamada también coqueluche, es contagiosa y afecta principalmente a los niños menores de cinco años y puede ser mortal en menores a seis meses.
La patología reapareció en Bolivia después de un silencio epidemiológico de nueve años, desde 2013.