La Gobernación de Tarija se encuentra en aprietos económicos por la deuda de más de 132,8 millones de bolivianos con la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), por concepto de la ejecución del Proyecto Construcción y Adecuación Técnica al Sistema Interconectado Nacional (SIN) del Sistema Central Tarija. Desde el nivel departamental habían propuesto un plan de pagos a la estatal que fue rechazado y consecuentemente se congelaron 60 millones de bolivianos a las arcas del Gobierno Departamental.
Cabe recordar que, a inicios del mes de julio, ENDE ya había reclamado al Gobierno Departamental el pago de la deuda por el Proyecto Construcción y Adecuación Técnica al SIN del Sistema Central Tarija, que incluía la ampliación de las Subestaciones Tarija, Villa Abaroa y La Tablada, además de la construcción de las líneas de transmisión en 115 kV Tarija – Villa Abaroa de 6,21 kilómetros y Villa Abaroa – La Tablada de 5,56 kilómetros. Mismos que tiene 99,3% de avance físico.
ENDE señalaba que el compromiso fue asumido en la gestión 2014, durante el interinado del gobernador Lino Condori, pero que en 2016 se firmaba un contrato modificatorio con un nuevo plan de pagos. Sin embargo, ante el incumplimiento en los compromisos económicos por parte de la Gobernación, en septiembre de 2018, ENDE Transmisión interpuso una Demanda Contenciosa Administrativa.
El director de políticas públicas de la gobernación de Tarija, Andrés Castellanos, señaló que existe un equipo técnico que actualmente realiza las gestiones para poder destrabar los 60 millones de bolivianos que han sido congelados y poder viabilizar esos recursos a favor de la salud y educación en el departamento.
Consultado sobre cómo está funcionando actualmente la Gobernación al tener esta cantidad de recursos congelados, Castellanos refirió que se está realizando algunos esfuerzos para poder cubrir los compromisos respectivos, como el pago de deudas entre otras responsabilidades.
“Lastimosamente esos 60 millones de bolivianos perjudican el desarrollo de la Gobernación, pero hay un equipo técnico y jurídico que está haciendo lo necesario para que la Gobernación no se paralice. (…) es difícil trabajar cuando se congelan las cuentas, pero lastimosamente es una deuda heredada y un compromiso asumido por Lino Condori”, señaló.
Castellanos enfatizó que nuevamente se está alistando una propuesta de plan de pagos, por lo que se esperanzó que esta iniciativa pueda ser considerada por ENDE y de esta manera proceder a la liberación de los recursos.
En esa misma línea, ENDE también había advertido que Servicios Eléctricos Tarija (Setar), de igual manera, tiene una deuda pendiente la cual supera los 52,4 millones de bolivianos por el Sistema Central Tarija y los Sistemas Yacuiba y Villa Montes.