La producción industrial del litio, uno de los pilares del plan de reactivación económica del Gobierno, tendrá que esperar un poco más. El inicio de operaciones de la Planta Industrial de Carbonato de Litio no podrá concretarse hasta que esté terminada su planta de tratamiento de agua, un proyecto que se extenderá al menos hasta junio de 2023.
El contrato para la planta industrial se firmó en septiembre de 2018 con un plazo inicial de 14 meses para la ejecución del proyecto (hasta noviembre de 2019). Las obras no se pudieron concluir debido a que se paralizaron en la gestión de Jeanine Áñez, según el actual ministro de Hidrocarburos y Energía, Franklin Molina, quien puso como segundo plazo tentativo el mes de febrero de 2022. En mayo, la misma autoridad, precisó que la planta industrial se terminaría de construir a fines de este año y que comenzará a operar “a inicios de 2023”.
Sin embargo, Yacimientos del Litio Bolivianos (YLB) lo dejó claro en varias oportunidades: “Las pruebas, la puesta en marcha y la operación industrial” de la Planta de Carbonato de Litio “dependen de la conclusión de la Planta de Tratamiento de Agua”, un proyecto complementario que aún no tiene contrato, pero que ya fue adjudicado a la boliviana Carlos Caballero en medio de una polémica sobre presuntas irregularidades cometidas en el proceso de adjudicación.
De acuerdo con el documento de licitación, el plazo máximo para la totalidad de los trabajos de la planta de tratamiento es de 300 días calendario (unos 10 meses), computables a partir del día hábil siguiente de la emisión de orden de proceder. Este trabajo implica el desarrollo de ingeniería, procura, construcción, precomisionado, puesta en marcha y pruebas de desempeño.
La planta de tratamiento de agua se construirá en inmediaciones de la Planta Industrial de Carbonato de Litio, complejo ubicado en el sur del salar de Uyuni, provincia Nor Lípez, del departamento de Potosí.
De acuerdo con el información de YLB, la ejecución del proyecto Construcción, Montaje y Puesta en Marcha del proyecto de Planta Industrial de Carbonato de Litio de Uyuni fue adjudicada a la asociación accidental Beijing Maison Engineering Company LTD y China Machinery Engineering Corporation (CMEC).
CMEC, al igual de la empresa CAMC Engineering Co Ltd –implicada en 2016 en un presunto tráfico de influencias en el país– forma parte del grupo Sinomach.
El dar valor agregado a los ingentes recursos evaporíticos de Uyuni es uno de los objetivos más ambiciosos de la gestión de gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS), que en principio optó por explotar el litio y los carbonatos de los salares bolivianos sin ayuda de otros países. Esta decisión fue anunciada por la administración de Evo Morales el 21 de octubre de 2010, cuando el gobierno también se puso como meta 2014 para fabricar baterías de litio en cantidades industriales.
Han pasado casi ocho años desde ese plazo inicial, pero la oferta de las plantas piloto de carbonato de litio y baterías aún no es significativa. Mientras tanto, se elige este año a la empresa internacional que con su tecnología de extracción directa será socia YLB en la explotación del litio boliviano y se espera el inicio de operaciones de la Planta Industrial de Carbonato de Litio.