La Alcaldía de La Paz confirmó que los 66 nuevos buses comenzarán a operar en octubre, seis meses después de su arribo a la sede de Gobierno. La demora se debe a los trámites que siguen para contratar el seguro y para que pasen a propiedad municipal.
Un especialista considera que estos procesos pudieron iniciarse antes de su arribo y teme que el polvo, su inamovilidad y la falta de cuidado dañen los equipos. En la actualidad, los vehículos ya van dos meses sin operar.
“Los buses nuevos van a estar en circulación aproximadamente en octubre. Usted sabe que no puede circular ningún vehículo sin seguro en la ciudad”, dijo el secretario de Movilidad Urbana, Enrique Villanueva.
El 3 de abril, el alcalde Iván Arias anunció que en mayo se lanzarían las nuevas rutas de los buses PumaKatari, la habilitación de una tarjeta única, las cámaras de seguridad en las paradas con acceso a wifi, un transporte integrado entre el municipal, público y teleférico previa concertación, pero las promesas no se cumplieron.
“En mayo estaríamos lanzando las nuevas rutas y nuevos servicios”, dijo Arias en esa oportunidad. “Tenemos que concertar con los choferes y con los vecinos. No se olvide que la idea nuestra es un transporte complementario, donde, por ejemplo, los Pumas alimenten a los privados, los privados alimenten a los Pumas, los privados y el Puma alimenten al teleférico”.
Esta nueva flota llegó para reemplazar a los 66 buses que fueron quemados en noviembre de 2019, luego de la renuncia de Evo Morales a la Presidencia. El proyecto de la anterior gestión municipal fue enviar a los vehículos ChikiTiti a cubrir rutas de alta pendiente o calles más estrechas que los Pumas no pueden ingresar. Se tenía prevista la habilitación de los trayectos a Mallasa, Pasankeri y La Portada. El proyecto fue truncado por la pérdida de los PumaKatari y los ChikiTiti salieron a apoyar las siete rutas ya establecidas.
El seguro cubrió los 80 millones de bolivianos para reponer los 66 buses. Éstos arribaron a La Paz a inicios de abril y un especialista municipal -que prefiere no dar a conocer su nombre- dijo que la flota debía ser incorporada de forma inmediata al servicio. “Los ChikiTiti debían ser replegados y recibir mantenimiento. Y con los Pumas podrían obtener mayores ingresos porque tienen mayor capacidad”, explicó la fuente.
Respecto a los trámites de propiedad y seguro, el especialista indicó que estos procesos pueden durar bastante tiempo, pero debían realizarse antes de la llegada de la flota a la ciudad. “Normalmente, el seguro se contrata cada dos años, pero no era necesario hacer otro proceso. El seguro tiene una cláusula de incorporación de nuevos buses”.
Advirtió que “lo más peligroso” es que los buses no tengan en este momento un seguro. “No se olviden que los buses fueron quemados y es gravísimo que ahora no estén asegurados. Deberían contar con este respaldo el mismo momento en el que la empresa los entregó al municipio”, afirmó.
Desde abril, hace dos meses, estos nuevos buses están parqueados en el Parque Urbano Central (PUC) y ya se nota el polvo en sus carrocerías. “Necesitan mantenimiento permanente y personal capacitado. Ahora están abandonados a su suerte en el Parque Urbano, cuando hay un patio central dedicado exclusivamente para la limpieza de los buses. Además, el polvo afecta el mantenimiento y hay partes que se pueden oxidar”. “No te compras un auto nuevo y lo dejas a la intemperie”, agregó.
“Los buses pasan un mes parados en barco y lo primero que se dañan son las baterías. (…) Pero la empresa se hace cargo de su reposición al momento de su entrega. Los buses tienen supresores de energía, pero deberían retirar las baterías para su mantenimiento”, dijo. Pidió que los vehículos sean protegidos del sol. “Los líquidos de los motores y otros temas mecánicos se pueden dañar. Deben encenderlos y limpiarlos”, añadió.
Las pruebas
Avances “Se hicieron (a los Pumas) varias pruebas en el centro de revisión técnica vehicular para ver la calidad de los frenos, luces, potencia del motor y control de emisiones”, declaró Enrique Villanueva, secretario de Movilidad Urbana. Por otro lado, el instituto técnico de la UMSA realizó otras mediciones para ver la calidad de los equipos.
Campo Se realizaron pruebas de campo con carga completa tanto en ascenso como en descenso para ver la potencia de los motores y la posibilidad de circulación en la urbe. “Las observaciones fueron muy pequeñas que no hacen al fondo. Los buses cumplen con todos los estándares de calidad requeridos por nosotros”, agregó el funcionario.