Ante una serie de cuestionamientos a las metas fijadas en el Presupuesto General del Estado (PGE) 2022, el Ministerio de Economía ratificó que se perfila un crecimiento económico en torno al 5,1 por ciento por la dinamización que impulsará la inversión pública, mientras que la tasa de inflación estará en 3,4 por ciento, lo cual garantiza la estabilidad de precios de la canasta familiar.
Además, esta cartera de Estado aseguró que las transferencias a los Gobiernos locales se incrementarán en 4,7 por ciento con relación a 2021.
Según un boletín oficial, en gestiones anteriores distintos organismos internacionales proyectaban tasas de crecimiento inferiores para Bolivia, pero la evidencia empírica muestra que éstos siempre subestimaron la capacidad de la economía boliviana.
Por otro lado, el PGE 2022 prevé una inversión pública de 5.015 millones de dólares, destinada principalmente a proyectos productivos, a objeto de dar continuidad a las políticas de industrialización para sustituir importaciones.
